12 de abril de 2011

Reseña: Los Exiliados #20

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Título en España: Los Exiliados #20: El hogar está donde está el corazón
Título en EEUU: Exilies nº100, X-Men: Die by the sword nº1-5, Exiles: Days of then and now
Formato: Tomo, tapas rústicas, 176 páginas, color.
Precio: 11.25 €
Editorial: Panini Cómics

Reseña:

Con El hogar está donde está el corazón llegamos a la veintena de números publicados en España de Los Exiliados (como siempre digo, uno más si recordamos aquel tomo dedicado a Dinastía de M que no tenía numeración pero que contenía números de la serie regular americana). Justamente, es llegar a esta cifra redonda y encontrarnos con que Panini bien podría haber sacado este número como un especial aparte, ya que es aquí donde se hace oficial el fin de la antigua cabecera de Exiles para dar paso a New Exiles, con el Patriarca Mutante, Chris Claremont, tomando el control total y absoluto de la nueva colección.

Este tomo consta de la miniserie X-Men: Die by the Sword, donde se produce en esperado cruce entre el equipo cuya colección guionizara anteriormente Chris Claremont, Excalibur, y Los Exiliados; el Exiles #100 donde se establece la nueva formación que tendrá el equipo a partir del primer número del siguiente volumen; y el especial Exiles: days of then and now, un cómic de los llamads one-shot que no es más que un mero relleno para el tomo, ya que su relación con las otras dos historias no es más que anecdótica.

La miniserie X-Men: Die by the Sword, más que un encuentro que provoca la alianza entre Excalibur y Los Exiliados, es una historia acerca del Capitán Britania y su equipo, donde reciben la inesperada ayuda de Los Exiliados. Al guion se encuentra Claremont, el cual hila fino y está muy acertado a la hora de buscarse la excusa, en forma de aventura de superhéroes, por supuesto, para que ambos grupos se encuentren uno con el otro. Aunque, claro, el veteranísimo autor no podía dejar de lado que hizo de Nocturna el personaje mediante el cual exponía a los lectores el drama que supuso para él estar al borde de la muerte con la embolia sufrida y de la cual se encuentra ya recuperado en la realización de esta miniserie. Por tanto, mientras Nocturna está junto con sus compañeros de Excalibur disfrutando de una fiesta, hace acto de presencia Ave de Trueno, su antiguo amor.

En pleno encuentro entre miembros de un equipo y otro, James Jaspers forja una alianza con Merlyn para asesinar a Roma y hacerse con el control del Omniverso. Como parte de este plan, envían a Rougemort a la fiesta para acabar con el Capitán Britania y eliminar una de las defenas más importanes con las que cuenta Roma. Todo esto desdencadenará una batalla entre el cuerpo de todos los capitanes, ayudados tanto por Excalibur como por Los Exiliados, contra James Jaspers, que ha vuelto de la muerte mucho más poderoso, y la capacidad de generar copias de La Furia. La miniserie cumple con su función específica, que es la de poner punto y finala la colección Excalibur, y dar la oportunidad de que se produzca el trasvase de miembros de un equipo a otro para que Claremont pueda disfrutar de la alineación que él pretende para el nuevo comienzo de Los Exiliados.

En líneas generales, es una buena historia: muchísima acción, momentos en los que parece que todo está perdido y acciones heroicas por parte de los personajes más carismáticos que resuelven la papeleta, mucho superhéroe involucrado (aunque estos sean de segunda y tercera fila) y todo se asienta en el pasado que construyó el propio Claremont allá en los años ochenta cuando guionizó el primer volumen de Excalibur. Sin embargo, el inconfundible estilo del Patriarca Mutante no ayuda en absoluto. Es un guionista genial pero venido a menos, ya que sus mejores trabajos tienen dos décadas de antigüedad, con lo que resulta muy incómodo tener que estar leyendo constantemente bocadillos en los que los personajes explican cada paso que dan. Es un enorme punto en contra para este tomo.

A los dibujos de esta miniserie se encuentra el artista catalán Juan Santacruz, ayudado en algún capítulo por Cafu. El nivel de dibujo es superior al del guion, aunque ello no sea una gran novedad si tenemos en cuenta que ya he comentado que estamos ante un flojo Claremont. Sin embargo, está un tanto lejos de la excelencia, pero sí que pega bastante con el estilo gráfico que caracterizaba Excalibur en sus últimos números. Mejorable en algunos aspectos, pero dan bien la talla.

Al Exiles #100, cronológicamente posterior a la miniserie anterior y muy bien situado en el tomo por parte de Panini, no solo voy a comentar lo malo, llegamos con muchos candidatos a formar parte de Los Exiliados. Claremont se toma todo el número para cerrar pequeñas tramas abiertas y explicar las razones por las cuales se van quedando en el equipo o se marchan de él algunos miembros. Ojo, que hay sorpresas, como no podía ser de otro modo, aunque no así en la alineación final, la cual, en un análisis rápido, nos recuerda las preferencias en cuanto a perfil de personajes protagonistas, que tiene Chris Claremont. Cierto halo emotivo, aunque no demasiado.

Los dibujos de este último número corren a cargo de Mike McKone, cuyo estilo destaca ya desde la primera viñeta. Yo considero a McKone un buen dibujante de cómic, pero mucho más efectivo en tebeos en los que hay acción y peleas que en este tipo de cómics en los que simplemente debe mostrar cómo pasan su tiempo Los Exiliados y enfatizar en cómo toman la decisión de quedarse o abandonar el equipo.

Por último, queda el especial. 22 páginas divididas en 8 capítulos con ocho dibujantes distintos para cada parte, pero todas bajo el mismo guion a manos de Mike Raicht. Interesante historia que sirve para revisitar varios mundos que ya salvaron los Exiliados a lo largo del centenar de números de su primer volumen y en el que se crea un nuevo grupo que no tengo claro si se volverá a utilizar alguna vez o simplemente se quedará en el limbo de los muchos grupos de superhéroes que se crean, y luego nadie supo de ellos.

En definitiva, es un tomo que no recomiendo a nadie que se quiera enganchara a Los Exiliados con la llegada de Chris Claremont (si hay alguien en esta situación), ya que lo ideal sería que esperase al número 21 que comienza desde el New Exiles #1 en adelante. Sí para los fieles a la serie, ya que aquí se explica qué ocurrirá con algún protagonista importante dentro de la historia particular de Los Exiliados. En líneas generales, un tomo bastante flojito.

5/10
(Aceptable)
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